Sobre lo humano, sobre el daño, sobre el desprecio
Estos días se hizo tristemente popular un vídeo de Lucía Peregrín, una chica trans que, desesperada y padeciendo una crisis de ansiedad, se dolía y lloraba por el rechazo que sufrió por ser quien es((Dejo el enlace al vídeo original en su canal de TikTok: https://acortar.link/nNis81)). Porque su cita la dejó tirada haciendo eso que hoy llaman ghosting —antes decíamos ser un gilipollas, los tiempos cambian—, en lo que podemos suponer fue un caso en el que mediaron excusas baratas, invenciones sobre la genitalia o demás chorradas autoexculpatorias con las que tapar la transfobia, el odio que vive detrás de todo ello. Y digo tristemente porque las redes sociales pusieron a funcionar su habitual maquinaria para dedicarle todo tipo de insultos, faltas de respeto, ataques y barbaridades de diverso pelaje.…